martes, 11 de junio de 2013

El extraño caso de no querer ver lo evidente.


Más de 18 casetas telefónicas en tan solo dos cuadras de la calle de Laureles, ubicada en Bosques de las Lomas, en la delegación Cuajimalpa. Extraño porque es una zona con muy poca afluencia peatonal. Extraño por no es una zona que necesite de teléfonos públicos a falta de este servicio en los hogares y oficinas. Extraño porque están casi todas las empresas telefónicas y ya todas las casetas muestran publicidad. Más extraño por el exceso de casetas y la falta de ética de los funcionarios que otorgaron los permisos.
Y como siempre la autoridad necesita que alguien levante una queja formal para que ellos puedan actuar contra lo evidente, y ese es el grave problema de esta administración, desde el Director Jurídico de Cuajimalpa hasta el Jefe de Gobierno del Distrito Federal prefieren mirar hacia otro lado, y esa actitud la tienen en todo, desde el mobiliario urbano que es un pequeño detalle de esta gran ciudad hasta los asesinatos en Tepito y los desaparecidos en el Heaven. Para todos los casos la autoridad voltea hacia otro lado, minimiza el problema, habla de pandillas, de faltas de permiso, de operativos y planes para despistar al ciudadano.
Se habló de un reordenamiento de la publicidad exterior y del mobiliario urbano, si, se reordeno entregando más permisos, creando caos con el fin de que la opacidad y los negocios oscuros sigan siendo una fuente de ingresos.
Hoy se habla de un plan para rescatar a la Morelos, Tepito, Zona Rosa y en un dejo de osadía Mancera dice que hasta la Condesa.
Los funcionarios cercanos a Mancera no han dado el ancho, no sirven para esta ciudad, ni el Procurador, ni el titular del INVEA, ninguno da el ancho, para una población que día a día ve como se violan sus derechos, su seguridad, su patrimonio.

¿Hasta cuando Mancera?

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