En los medios que son gratis para los partidos políticos y sus candidatos, los bloques de comerciales que nos recetan son todos iguales, entre un spot y otro no sabes que partido político es el que nos esta solicitando nuestro voto, todos suenan igual, todos dicen lo mismo, y ninguno dice algo interesante, ni tiene nada interesante que mostrar.
Por otro lado, en los medios que les cuestan, entre la publicidad exterior y las redes sociales se repite la misma desgracia, la publicidad exterior es un compendio de fotos y frases que nada dicen, nada transmiten y que se nota que usan para gastar el presupuesto y hacer como que hacen campaña y que están gastando recursos, pero hasta ahí, la publicidad exterior la utilizan para contaminar las ciudades, ese parece ser le fin y por lo general es el resultado, y si tomamos en cuenta el perifoneo y el reparto de propaganda impresa, las calles y las ciudades se vuelven un mugrerío.
Y las redes sociales se han convertido en un circo con demasiados payasos cada uno más malo que el otro, miles de payasos queriendo ser más ridículo que el contrario, cada vez más absurdo que el absurdo y así en un circulo virtuoso del absurdo y la estupidez.
Pocas campañas se salvan.
Tengo la impresión que como algunos medios no les cuestan, entonces cualquier porquería que transmitan es buena para ellos, y en los medios que si les cuestan, cualquier cosa que hagan basta para dar algo a la fiscalización del INE, y lo demás del dinero llevarlo a sus arcas.
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