No cabe duda que el Metro se volvió el peor dolor de cabeza para Claudia y sus asesores, las fallas, incidentes, accidentes y muertos que ha ido dejando el Metro sobre la administración Sheinbaum, son un torpedo a la imagen de la regenta. Y sí bien la imagen de la regenta era gris, mediocre y sin chispa, hoy a todos estos atributos se le suma la incapacidad, la soberbia y la ineptitud con la que ha manejado el tema Metro.
En la entrevista que le dio a Javier Solórzano su discurso es casi, casi como si los ciudadanos deberíamos darle las gracias por su sacrificio en querer ser corcholata y estar dispuesta en participar en la encuesta de Morena. Claudia en su pequeño mundo de voces que le dicen que esta calificada para ser presidenta, ha olvidado que su principal carta de presentación es que la CDMX funcione, la ciudad no funciona, el sistema de transporte más importante no funciona y la Guardia Nacional no ayuda ha que lo haga.
Hoy la falta de trabajo y de pericia como jefa de gobierno se está convirtiendo en un lastre para sus sueños de ser candidata y lo más importante, Claudia es un lastre para las aspiraciones de Delfina en el Estado de México, ese vecino que tiene elecciones este año, y que un día si y otro también sus habitantes cruzan de una a otra entidad y ven el caos de la CDMX, esos mexiquenses usan el Metro y ven lo que un mal gobierno puede ocasionar. Hoy Claudia se ha convertido en un lastre para Morena.
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