Me impresiona que el GDF se regodee de la acción de los granaderos el 20 de noviembre, una acción que rebaso por mucho lo que pasaba en el zócalo, un pequeño grupo encapuchado trato de reventar una marcha que fue pacifica e impresionante por la cantidad de gente que asistió. Pero para un pequeño grupo el GDF y el gobierno federal usaron una fuerza increíble, una fuerza y una actitud que debería de usarse para otras cosas, hoy ambas partes se sienten valientes, pero si esa valentía que según ellos demostraron se usara para atacar los problemas reales estaríamos en otro país. Un país que no cancela la licitación de un tren rápido, un país que no tiene escándalos de Casa Blanca, un país donde las leyes se respetan en todos los niveles, Peña Nieto, Mancera y demás políticos deberían de ser valientes a la hora de aplicar la ley, de hacerla respetar.
Los anarquistas han estado presentes en todas las marchas los últimos 10 años, y en cada una de esas marchas han causado destrozos, el GDF y el gobierno federal saben quienes son, saben quien esta tras de ellos, quien los financia, quien los alecciona, pero hoy, que la población en su mayoría levanta la voz y los intereses de la clase politice se ve amenazada se usa a la fuerza a diestra y siniestra, Mancera y los anteriores jefes de gobierno surgidos del PRD, así como los secretarios de Gobernación de Osorio para a tras han permitido que marchas y bloqueos se realicen mientras no han sido afectados sus principados, mientras los encapuchados no atentan contra sus prebendas y forma de vida, no han sido parados, ¿por qué ahora si?, es acaso que esperaban que con esta demostración de fuerza del estado la sociedad se callará, creo que fallaron, la fuerza del estado no ha sido pareja, cosa de ver Guerrero, Tamaulipas, Michoacán, Estado de México y cualquier estado de la República. La fuerza del estado se debe de aplicar a los criminales, pero pedir esto, sería tanto como pedir que se den un balazo en el pie.
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